En medio del debate por una reforma al sistema de pensiones y la labor paralela que realiza la Comisión Bravo, algunas AFP han planteado la idea de aumentar su espectro de inversiones con el objetivo de mejorar la rentabilidad de los fondos y por consiguiente, aumentar las pensiones.
Una de las opciones es la inversión en activos alternativos, tema que fue abordado en el seminario “En qué invierten las AFP”, organizado conjuntamente por AIPEF y Sura Chile y en el cual se analizó el régimen de inversiones de los fondos de pensiones en Chile y la posibilidad de incorporar activos alternativos al portafolio tal como lo han hecho países como Canadá y Estados Unidos.
Actualmente, las administradoras tienen un 45% de los fondos invertidos en el extranjero y el otro 55% en Chile. Según el CEO de Sura Chile, Francisco Murillo, “es necesario aumentar el límite de inversión en activos alternativos como, por ejemplo, en bienes inmobiliarios, y generar un sublímite de inversión dentro de renta fija, lo que puede generar aportes significativos”.
En este sentido, Fernando Sánchez, presidente de Independencia Rentas Inmobiliarias detalló en cifras el efecto que tendrían este tipo de activos en los fondos de pensiones. “Debe considerarse una apertura a nuevas clases de activos para seguir diversificando y mejorando el retorno, ya que un 1% de retorno anual promedio adicional en la vida activa de un afiliado, puede mejorar la pensión entre un 20% y un 25% por toda la vida del afiliado”, recalcó Sánchez.
Actualmente, los activos alternativos están prácticamente fuera del portafolio de inversión de las administradoras chilenas, a diferencia de países como Canadá y Estados Unidos, que destinan parte importante de sus inversiones a estos instrumentos, ya sea a través de activos inmobiliarios, de infraestructura o energéticos, entre otros.



